GALLETAS DE ZANAHORIA

Llevaba unos días dándole vueltas a hacer algo para Pascua. No sé si sabéis que en Andalucía se celebra poco o nada... Aquí somos más de la Pasión de la Semana Santa...

Pero siempre me ha llamado la atención. Los huevos decorados, los conejos de chocolate...

El año pasado hice unos Huevos de Pascua en Nido de Bizcocho, así que este año quería hacer algo que no implicara decorar huevos o hacer recetas en forma de huevo...

Y por repetir la fuente de inspiración del año pasado, me encontré con unas Galletas de Zanahoria con una pinta buenísima en el libro Las recetas de la Felicidad, de Sandra Mangas.

Los ingredientes los he modificado, cambiando el azúcar y la harina por las versiones integrales en lugar de refinadas:
- 225 gr. mantequilla, fría, cortada en cuadraditos
- 225 gr. azúcar integral de caña
- 100 gr. zanahoria rallada muy finamente
- 330 gr. harina integral
- 1 cucharadita de canela molida
- 1 pizca de sal

Amasamos a mano la mantequilla con el azúcar. Como el azúcar moreno es más grueso, lo he pasado por la batidora para que sea más fácil. Tiene que quedar la masa muy integrada.

Vamos añadiendo el resto de ingredientes: primero la zanahoria rallada muy fina. Como tenía fuera la batidora es lo que yo he utilizado, quedando los trocitos de la verdura algo más visibles. Si los queréis más "discretos" creo que con un rallador fino os quedarán perfectos.

Y luego la harina (que me gusta tamizar siempre), con la canela. Seguimos amasando hasta obtener una masa bien integrada.

Estiramos la masa hasta dejarla de medio centímetro de grosor, cortamos las galletas y dejamos reposar, dos horas en el frigo o 15 minutos en el congelador.

Calentamos el horno a 180ºC e introducimos las galletas, entre 10 y 15 minutos.

Cuando estén listas, dejamos reposar 5 minutos y pasamos a una rejilla para que se enfríen.

Sandra prepara un relleno y monta las galletas de dos en dos, pero yo las he dejado simples.

Para decorarlas, he decidido variar un poco de la receta original, y en lugar de utilizar zanahorias de azúcar o mazapán, las he hecho con chocolate fundido. ¿Queréis ver cómo?

Necesitaremos:

- chocolate blanco para postres

- colorante naranja y verde

- dos cucuruchos de papel de horno

- una lámina de papel de horno para el chocolate.

Primero, cogemos la mitad del chocolate y lo fundimos. Si lo hacéis en el micro, como yo, en golpes de 30 segundos, que no se nos queme...

Le añadimos colorante naranja, movemos rápidamente para que quede bien integrado, y vertemos en un cucurucho de papel de horno, que utilizaremos como manga pastelera.

Podemos hacer las zanahorias improvisando o dibujar en la lámina papel de horno y darle la vuelta. Yo las he marcado, aunque luego (como casi siempre) he ido por libre... Si no tenéis mucho ojo con el tamaño de las zanahorias en relación con el de la galleta, podéis marcar con el lápiz el contorno del cortador sobre el papel, para que no os salgan ni muy pequeñas ni muy grandes.

Dejamos que endurezca un poco.

Repetimos la operación, pero esta vez añadiendo colorante verde. Dibujamos la ramita de cada zanahoria, y dejamos que enfríe y endurezca completamente. 

Si os parece, podéis hacer las zanahorias de chocolate mientras se enfría la masa de las galletas.

Cuando las zanahorias hayan solidificado se desprenderán del papel sin ningún problema.

Si ya están frías las galletas, sólo queda poner una gotita de chocolate fundido en la galleta y colocar encima una zanahoria.

Esperamos a que se enfríe nuevamente para que no se caigan...

¡Y listas para merendar!

¿Os apetecen?

Con este post participo en la Fiesta de Enlaces nº 63 de Personalización de Blogs

PEANUT BUTTER SQUARES - RETO COCINILLAS MARZO

De nuevo fin de mes, y de nuevo RETO COCINILLAS.

Este mes toca dulce, y la receta que hemos hecho son CUADRADITOS DE MANTEQUILLA DE CACAHUETE.

Este receta, como siempre, la hacemos siguiendo los pasos de Lorraine Pascale.

Es una receta muy diferente, al menos para mi, que nunca había probado la mantequilla de cacahuete.

Como curiosidad, comentar que hay dos tipos de mantequilla: suave y crujiente. La diferencia es que la primera es una crema normal, mientras que la crujiente tiene trocitos de cacahuete...

Aquí tenéis los ingredientes que hemos utilizado:

Estas son las medidas de la receta tal cual, que yo he reducido a la mitad...

Con las proporciones originales Lorraine utiliza una fuente de 20x20 cm., la cual forra de papel de cocina para poder sacar el postre con facilidad.

Derretimos la mantequilla normal a fuego muy lento. 

Troceamos las galletas (qué bien huelen...) y junto con el azúcar, las trituramos en un robot de cocina hasta que formen como una harina gruesa.

Fundida la mantequilla, la retiramos del fuego y le añadimos la miga de galleta y azúcar, moviendo hasta incorporar bien.

Añadimos la vainilla y la mantequilla de cacahuete, y movemos hasta que esté todo bien mezclado. 

Al considerar que era un postre "contundente" (por no decir una bomba...), pensé en hacerlo de la mismas dimensiones, de forma que me salieran los cuadraditos más finos. Para facilitar el corte también al final, decidí utilizar un molde para hacer tabletas de chocolate que tenía por casa y que me ha venido estupendo. Eso sí, utilicé film de cocina en lugar de papel de horno.

Hay que apretar bien la mezcla con una cuchara, para que luego quede bien sólida y firme. Es bueno darle un par de golpes secos, para que si ha quedado aire salgan las burbujas hacia arriba.

Según la receta de Lorraine, a continuación vertemos el chocolate fundido. Pero yo decidí esperar a que se solidificase un poco la mezcla, ya que la veía muy líquida...

Así que la introduje unos 20-30 minutos en el congelador. Al sacarla, guiándome como pude por las líneas del molde, con la parte de atrás de un cuchillo marqué cuadraditos, pensando que así sería más fácil marcar el chocolate.

Derretimos el chocolate al baño María, o en el microondas (a intervalos de 30 segundos para que no se queme en este caso).

Vertemos y extendemos sobre la base.

La primera compañera que hizo el reto nos comentó que al no llevar el chocolate nata ni mantequilla, al solidificar queda tan duro que se rompía al partirlo con cuchillo, recomendando que marcásemos antes de que se solidificara del todo.

Como veréis, eso es lo bueno de estos retos, que aunque no enseñamos el resultado hasta el último día del mes, vamos compartiendo dudas y opiniones durante todo el mes. Y se aprende muchísimo, que es de lo que se trata.

Así que tras introducir unos 15 minutos en el frigo, podemos sacarlo y marcar los cuadrados...

Como podéis ver, aproveché para cortar los sobrantes de los lados (la parte de abajo está todavía "sucia" y la de la derecha ya cortada).

Dejamos otro ratito en nevera para que solidifique el chocolate.

Desmoldamos con la ayuda del papel de cocina (film en mi caso).

Troceamos y servimos. Listos para acompañar un café.

Están muy buenos. El sabor del cacahuete es interesante.

Os dejo con el resto de versiones de los participantes en el RETO COCINILLAS:

Teresa (http://aureaskitchen.blogspot.com.es)

Galletas Mamipaz (http://galletasmamipaz.blogspot.com.es)

Vane González (http://platanoychocolate.wordpress.com)

Chus Nenalinda (http://siguiendoanenalinda.blogspot.com.es)

Sofía (http://creacionesreposteras.blogspot.com.es)

Vivi Taboada (http://ocarondalareira.blogspot.com.es)

Vivi Martinez (http://hoycocinavivi.blogspot.com.es)

Blanca (http://acalablanca.blogspot.com.es)

Ana (www.laguindadelpastel.es)

Cristina (http://plusquechocolat.blogspot.com.es)

Marisa (http://marisaenlacocina.blogspot.com.es)

¡¡Besitos!!

GALLETAS PARA EL 40 CUMPLEAÑOS

Imagino que a estas alturas ya sabréis que a finales de febrero celebramos en casa los 40 años de Rafa, mi marido.

Y también que quisimos que a nadie le quedase la duda de que no eran ni 39 ni 41, sino 40...

Así que las galletas que regalamos a cada invitado no podían dejar de tener el número en cuestión.

Compré unos cortadores con los números, pero no tenía claro si iba a hacer una galleta en forma de número, una galleta redonda y hacer el número con fondant... Y hablando un día con Sor Pastelito, llegamos a una conclusión: lo mejor iba a ser hacer una galleta redonda pero con el número en caramelo.

Muy dispuesta compré los caramelos que utilicé para las Galletas de Cristal con Jengibre y Canela que hice en Navidad. Son de sandía, y me gustan porque son los únicos caramelos que no pierden el color al derretirse en el horno.

La receta que utilicé es la misma que suelo utilizar para las galletas de mantequilla, y que podréis ver aquí.

Así que una vez hecha la masa, reposada y estirada, cortamos las galletas en círculo, teniendo en cuenta el tamaño de los números que queremos recortar dentro.

Al ser los números pequeños y más intrincados que otros cortadores, antes de cortarlos volví a meter las galletas en el frigo, para que se endureciera otra vez la masa.

Al sacar las galletas, pasé los cortadores por harina antes de cada corte. Así además, me aseguro que los números, que descartamos para estas galletas, se puedan retirar con facilidad y puedan ser "reutilizados" para hacer más galletas...

Reparto las galletas en la bandeja, sobre papel de horno, y reparto en caramelo en los huecos formados por los números. 

En cuanto al cero, coloqué un caramelo entero en el centro del cero, y encima, el hueco en masa. No sabía si quedaría bien, así que la primera hornada fue un poco experimental.

Pero funcionó. El caramelo, al derretirse, se distribuye bien bajo el trocito de masa de galleta, formando un cero casi perfecto.

Una vez horneadas mis galletas de cristal, me quedaban los números...

Coloqué un número un poco sobre el otro, presioné, y al hornear, se quedó un 40 bien firme.

Algunas galletas las horneé con brocheta, para ponerlas para decorar.

Pero la mayoría las metimos en su bolsa para regalar, como habéis visto en la primera foto, con una etiqueta "conmemorativa"... ;-) 

Os dejo la receta por si os animáis a hacerlas

¡¡Besitos!!


Con este enlace participo en la Fiesta de Enlaces Nº 59 de Personalización de Blogs

PANNACOTTA DE ARROZ CON LECHE

El último fin de semana de febrero, Rafa cumplió 40 años. Y lo celebramos en casa con toda la familia.

No fue un cumpleaños sorpresa, porque Rafa tenía muchísimas ganas de organizar algo. Así que entre los dos empezamos a pensar recetas, algunas nuevas y otras ya "dominadas".

Así que os enseñaré algunas de las cosas que hicimos, pero comenzando por el postre...

Llevaba tiempo con una receta anotada: PANNACOTTA DE ARROZ CON LECHE.

Hace unos años Rafa me regaló una colección de libros sobre comida italiana, y en el dedicado a los postres explicaban cómo hacer la Panna Cotta, o crema cocida, un postre típico de la Toscana. Como es tan sencilla, la he hecho muchas veces, acompañada de salsa de frutos rojos.

Pero era hora de probar algo diferente, así que preparé los ingredientes:

- 125 gr. arroz con leche
- 100 ml. nata
- 250 ml. leche
- 4 hojas de gelatina
- 2 cucharadas de azúcar
- 1 rama de canela
- canela en polvo para decorar

En primer lugar, ponemos las hojas de gelatina a remojo, en agua a temperatura ambiente.

Mientras se hidratan, en un cazo, calentamos la nata con el azúcar y con la rama de canela.

Trituramos el arroz con leche, para que quede bien fino.

Mezclamos el puré de arroz con leche con los 250 ml. de leche.

Escurrimos las hojas de gelatina y añadimos a la nata.

Cuando estén bien disueltas, se añade la nata a la mezcla de arroz con leche (retirada la rama de canela), y se tritura todo junto otra vez.

Y ahora, en lugar de verterlo en flaneras individuales o una grande, utilicé unos moldes para cubitos de hielo.

Hay que vigilar que la mezcla no se salga de cada cubito, ya que si se han unido varios a la hora de desmoldar  se pueden romper, perdiendo la forma que estamos buscando.

Como la leche y el arroz estaban a temperatura ambiente, y la nata no ha hervido, podemos meter las cubiteras en el frigo para que solidifique bien sin necesidad de esperar a que se atempere.

Hay que dejar transcurrir al menos hora y media.

A la hora de servir, se pueden poner en una fuente, o bien en una copa de Martini. Se espolvorean con canela en polvo un poco, y listos para ser comidos.

Espero que os animéis a hacerla, que como veis, es fácil y muy resultona.
¡¡Besitos!!

Este post participa en la Fiesta de Enlaces nº 57 de Personalización de Blogs

CORAZONES DE AZÚCAR

Estas Navidades he disfrutado muchísimo de un libro que acababa de salir: Las Recetas de la Felicidad, de Sandra Mangas...

Quienes estéis al tanto de los cocineros de la blogosfera sabréis quién es... Para los que no, os cuento que es la autora del blog La Receta de la Felicidad, y que sus recetas tienen una originalidad en su presentación que las hace doblemente buenas, como sus famosos brownies en cáscara de huevo en los que yo me inspiré para este desayuno en Pascua el año pasado...

Una de las cosas que me llamó muchísimo la atención son los azucarillos de colores que enseña a hacer. Y qué mejor ocasión que San Valentín para ponerla en práctica...

Para hacer los azucarillos necesitamos:

- 220 gr. Azúcar Blanco

- 1 cucharadita Agua

- Colorante (opcional)

- Moldes con formas: como se acercaba San Valentín decidí hacerlos en forma de corazón, pero vale cualquier molde que tengáis en casa y que sea apto para microondas.

Mezclamos el azúcar con el agua, removiendo hasta que todo el azúcar tenga un aspecto como de arena mojada.

En lugar de colorear todos los terrones, decidí comenzar haciendo corazones blancos...

Hay que llenar cada hueco con azúcar apretando bien con los dedos, para que no quede ningún hueco por dentro. Si no, al desmoldarlos os encontraréis con los huecos que han dejado las pequeñas burbujas de aire...

Seguimos con el resto del azúcar, al que le añadimos el colorante elegido y mezclamos.

Al utilizar yo colorante en gel, cuesta un poquito más que se integre todo, pero con un pelín de paciencia queda perfecto...

Para colocar ahora el azúcar coloreado conviene poner una servilleta de papel sobre los azucarillos blancos, para que no caiga azúcar rojo sobre el blanco.

Con la misma lengua con la que hemos mezclado los ingredientes retiramos el exceso de la mezcla para que la superficie por este lado quede plana y lisa.

Sandra Mangas nos propone dejarlos secar en un lugar seco una hora mínimo. Pero con la "Ciclogénesis Eléctrica" que tenemos encima hay una humedad tremenda, así que he optado por el "plan B": introducir en el microondas a potencia máxima 45 segundos.

Los sacamos y dejamos unos minutos antes de desmoldar. Colocamos un plato o recipiente plano encima (yo he utilizado una bandeja cubierta con papel de horno), giramos con rapidez y desmoldamos...

Y ya podemos guardar en nuestro azucarero...

...preparados para endulzar un té mientras disfrutamos con un buen libro

Como veis, tener estos azucarillos tan monos no requiere mucho. Lo más complicado creo que es decidirse por la forma y el color.

Además, siempre podéis adaptaros a cada ocasión, poniéndole a los ingredientes lo que queráis: unas gotas de zumo de limón, por ejemplo, colorante amarillo y un molde en forma de gajos de limón, y tenemos un toque especial para endulzar ese "Té con limón y canela" que tanto me gusta a mi... :-D

¡¡Besitos!!

TARTA DE PERA, ALMENDRA Y AMARETTO - RETO COCINILLAS ENERO

Fin de mes. ¿Y qué significa eso? ¡¡¡Reto Cocinillas!!!

Es el primer reto de este año. Como 2013 lo cerramos con un reto salado, ahora toca dulce.

La opción, bien rica y con un punto original: Tarta de Pera, Almendra y Amaretto.

Los ingredientes que vamos a utilizar son:

• 1 paquete de masa quebrada
• 100g mantequilla blanda
• 100g azúcar blanco
• 100g almendra molida
• 3 cucharadas soperas harina, un poco más para espolvorear
• 1 huevo
• 1 cucharada sopera licor de amaretto
• 4 peras maduras

Si además la acompañamos de la crema de mascarpone que hace Lorraine, vamos a necesitar:

• 250g mascarpone
• 1 trozo de jengibre escarchado
• ½ vaina de vainilla o unas gotas de extracto de vainilla
• 50g azúcar glass

Por último,  a la hora de servir nos va a hacer falta:

• 1 cucharada sopera azúcar glass
• Unas hojas de menta

Sin embargo, como en casa no tenía licor de almendra y sí de avellana, y además un paquete de avellana molida, he cambiado un fruto seco por otro. Además, el acompañamiento de crema de queso me parecía un poco pesado (la tarta es una bomba ella solita...). Así que ésta es mi lista de ingredientes:

Precalentamos el horno a 180º.

Estiramos la masa quebrada. Untamos el molde que vayamos a utilizar con un poco de mantequilla y espolvoreamos harina. Si nos ayudamos con una brocha de silicona es muy fácil...

Una vez estirada la masa sobre el molde reservamos en la nevera.

Mezclar la mantequilla con el azúcar hasta que quede bien integrado. 

Añadimos las almendras molidas (en mi caso avellanas...) y la harina. Mezclamos bien.

Añadir el huevo, que a mi me gusta batir previamente. 

Ahora el Amaretto, aunque como en casa no gusta este licor, ya sabéis que he utilizado otro. 

Batimos bien para que quede todo bien mezclado. 

Sacamos el molde de la nevera y extendemos el relleno alisándolo bien.

Lavamos y pelamos las peras, y las cortamos a lo largo en dos mitades. Ahora hay que decidir cómo las vamos a poner en la tarta, si queremos que hagan algún dibujo o alguna forma, para que el corte se apapte a éste.

Como no tenía muy claro si quedaría bien hecha la fruta o no, la mitad de las piezas las puse en rodajitas de dos o tres milímetros, y el resto enteras.

Horneamos durante 35-45 minutos y sacamos cuando el relleno esté dorado.

Si vais a acompañar la tarta con la crema de mascarpone, unos 5 minutos antes de que la tarta esté lista, poner el queso en un bol, picar muy finamente el jengibre y  añadir las semillas de vainilla o el extracto. Tamizar el azúcar glass sobre el bol y mezclar con cuidado. No batir mucho ya que el mascarpone puede separarse quedando con una textura granulada. Reservarmos.

Cuando la tarta esté lista, la masa deberá estar dorada y el relleno de almendra parecerá que se ha hinchado alrededor de las peras.

Sacamos del horno y dejamos enfriar unos minutos.

Como me parecía que al relleno le faltaba un puntito, y para probar acabados, puse azúcar moreno sobre varios trozos de pera y gratiné.... Y por eso me quedó así de tostadita....

Retiramos del molde y ponemos en una fuente para servir.

Colocamos las hojitas de menta para decorar, y espolvoreamos con un poco de azúcar glass.

Sinceramente, el sabor y la textura de la tarta me sorprendieron. La fruta ha quedado hecha pero con un punto "al dente" buenísimo (la fruta "blandengue" no nos va mucho en casa....), tanto las piezas que estaban en rodajitas como las enteras. Y la mezcla del relleno de avellanas queda hecha pero jugosa.

Por otro lado, creo que la crema de queso o un helado le habrían ido bien si la tarta hubiese sido para merendar, pero tomándola nosotros para postre hicimos bien en no añadir nada más (iba a resultar un poco pesado...). 

Aquí tenéis el resto de participantes del reto. Me encanta las diferentes versiones que salen de una misma receta en base a la persona que la hace :-)

Teresa Alcántara, de Aurea's Kitchen

Chus Nenalinda, de Siguiendo a Nenalinda

Vivi Taboada, de Ó Carón da Lareira 

Victoria Martínez, de Hoy cocina Vivi 

Blanca, de Menjar a Cala Blanca 

Vane, de Plátano & Chocolate 

Marisa, de Marisa en la Cocina

Paz, de Galletas Mamipaz

Cristina, de Plus que Chocolat

¡¡Besitos!!